Estimadas pupilas:

Queréis saber si un hombre os defenderá de todos los peligros y se batirá por vosotras cual caballero andante?

Tenéis dos opciones llevarlo a Kenia y soltarlo delante de un león u otra más económica, la indiscutible prueba de la cucaracha.

Todas sabemos que una Señorita en edad de merecer tiene licencia para ser histérica en determinadas situaciones tales como las rebajas, la aparición de la primera pata de gallo y…la presencia de criaturas de 8 patas.

Si queréis saber si él es un hombre cazador de pies a cabeza, no tenéis más que disponer de uno de estos animalitos que previamente os habrá proporcionado el sobrinito escatológico que todas tenemos. Una vez escogido el momento y soltado con disimulo el bicho, sólo tenéis que decir:

– Fernando, Oh Dios mío una cucaracha.Voy a morirme.

Si Fernando es un hombretón de verdad, correrá raudo y todo el peso de su Panama Jack caerá sobre la cucaracha.Tan importante como el asesinato es que se deshaga del cadáver de una manera discreta.

Si por el contrario se sube a una silla y grita:

– Agghhhhhhhhhhhhh, mátala mátala o me muero

Entonces queridas mías ha llegado el momento de tomar una solución final en vuestra relación.

Puedes unirte al grupo de Ponle una vela a San Antonio en facebook